La Consejería de Coordinación y Medio Ambiente ha invertido 41.000 euros para posibilitar que las personas con movilidad reducida y los carros de bebé lleguen hasta la arena de la playa.
La playa de la Ensenada de Galápagos ha abierto hoy al baño y lo hace con una importante novedad. Desde ahora cuenta con una rampa de acceso para salvar el desnivel y posibilitar así que las personas con movilidad reducida y los carros de bebé lleguen hasta la arena. De esta manera, todas las playas del litoral melillense cuentan con accesos adaptados desde la vía pública.
La Consejería de Coordinación y Medio Ambiente ha habilitado una pendiente inferior al 8 por ciento, cumpliendo así la normativa. Además, se ha adaptado a las exigencias de ubicarse dentro del Foso de Santiago, en el Segundo Recinto Fortificado, zona de especial cuidado al ser patrimonio histórico-artístico.
Con esta actuación, la Consejería ha ejecutado alrededor de una veintena de proyectos relacionados con la movilidad sostenible en lo que va de legislatura, obras que han contado siempre con presupuestos inferiores a 50.000 euros, en este caso 41.000.
Fuente: Melillamedia.es