Nota sobre la incidencia en el suministro de agua potable

Nota sobre la incidencia en el suministro de agua potable

A continuación, informamos de las circunstancias que se han producido en la Planta Desalinizadora de Aguadú, desde la nota informativa enviada a primera hora de la tarde de ayer, y de las consiguientes previsiones de suministro.

Como se preveía, en la noche de ayer se pudo poner en marcha una de las tres líneas de desalación, si bien el alto índice de ensuciamiento que mantiene el agua ha impedido poner en marcha de forma estable una segunda línea.

De acuerdo a las predicciones meteorológicas sobre oleaje, se espera que, sobre las 15 horas de hoy domingo, este índice disminuya y se pueda contar con la segunda línea en producción continua. Igualmente se trabaja con la previsión de que en la mañana del lunes se pueda arrancar la tercera y volver a la situación de normalidad en la producción de agua potable de la desalinizadora.

Con todo ello, hoy domingo se procurará mantener el servicio a toda la Ciudad hasta las 20.00 horas y reponerlo a las 6.30 horas del lunes día 18.

Si las previsiones se cumplen y el nivel de los depósitos lo permite (lo cual estará en función de la hora a la que se recuperen la segunda y tercera líneas y del consumo), el lunes se intentará volver a la situación normal.

NOTA 1:

La Ciudad también ha solicitado que se aporte agua del Pantano de las Adelfas (instalación dependiente igualmente del Gobierno de España) para paliar la situación extraordinaria, lo que no ha sido posible al no contar dicha instalación con agua suficiente para su extracción.

NOTA 2:

Debemos aclarar que las informaciones sobre la Planta Desalinizadora nos llegan directamente de la empresa que opera dicha planta (FERROVIAL-CADAGUA), cuyo contrato es competencia de la Dirección General del Agua. En el caso del pantano, la información es de la Confederación Hidrográfica del Guadalquivir.

En ambos casos se trata de instalaciones cuyo funcionamiento es responsabilidad exclusiva del Gobierno Central, cuya representación en Melilla entendemos que debía ser quien informara a la Ciudad Autónoma (como único cliente y quien abona el coste) y a los ciudadanos (como destinatarios finales del agua producida).

Dado que dicha comunicación no se produce la Ciudad se ve obligada, por responsabilidad hacia los ciudadanos, a asumir el papel de informador de la problemática de instalaciones que no opera ni son de su competencia, lo que puede llevar a confusión a algunas personas al respecto.

Lo que resulta intolerable es que la secretaria general del PSOE de Melilla, en vez de dar explicaciones por los problemas de las instalaciones que opera el Gobierno de su partido, se dedique a reclamárselas, en vez de a la Delegación del Gobierno, al Gobierno de la Ciudad, cuya actuación solo es sufrir las consecuencias de los fallos de funcionamiento (por causas naturales o averías) de estas instalaciones, siendo el único que está tomando las medidas extraordinarias posibles (en cuanto a la producción de pozos y control del abastecimiento) para paliar las situación creada por los organismos del Gobierno de su partido.